Los caminos desterrados de la albeitería nos conectan con un mundo incomprendido y por ello olvidad

(las entradas son revisiones de textos antiguos y
no tan antiguos, el autor no incita ni se responsabiliza
del uso de los remedios expuestos, solo hace un repaso de
textos históricos)

viernes, 8 de octubre de 2010

Tétanos grave curados por paseo forzado

AGLIANY.—DEUX CAS CONSÉCUTIFS DE TÉTANOS GRAVE GUÉRIS PAR LA PROMENADE
FORCEE, SANS ACUN TRA1TEMENT MEDICAL (DOS CASOS CONSECUTIVOS DE TÉTANOS GRAVE CURADOS POR EL PASEO FORZADO, SIN NINGÚN TRATAMIENTO MÉDICO).

Revue Vétérinaire et Journal de Médecine Vétérinaire et de Zootechnie, To-louse, LXXIX, 441-444, agosto 1927.

Con el siguiente concepto de Lucas-Championiére y Lagrange «Para los músculos, como para los tendones y las articulaciones, el movimiento es la vida, la inmovilidad es la muerte», ' encabeza el autor el relato de dos casos de télanos grave en el caballo, curados sin tratamiento,
a pesar de haberse presentado'trismus completo.
Los evidentes e innumerables fracasos de la terapéutica clásica del tétanos habían determinado
al autor a abandonar para siempre un tratamiento que considera, no sólo como absolutamente
ineficaz, sino como perjudicial, cuando las circunstancias en que se presentó el primero de los dos casos le incitáronla intentar una experiencia audaz e inédita. Era un caballo
que enfermó en plenas maniobras y que, por no haber veterinario en la columna, hubo de recorrer, para ser presentado al autor tres días después, seis kilómetros. Ingresó en la enfermería con tétanos de la forma mas grave. Curó completamente en un mes.
Dos meses más tarde se presentó un nuevo caso de la misma gravedad en otro caballo que tenía en el talón externo del pie derecho un alcance reciente e insignificante; esta lesión no fué objeto del menor cuidado, ni siquiera un lavado antiséptico, curando naturalmente. El enfermo, al que se pone avena en el pesebre, intenta tímidamente, y desde luego sin éxito, comer; la prehensión es imposible; el estremo de los labios, apenas movible, despa. rrama los granos de avena sin lograr cogerlos. La lengua, cuya punta está entre las dos arcadas
incisivas, apenas se mueve; las mandíbulas, muy contracturadas, tienen un juego muv limitado. Pero con todas estas dificultsdes, el anima! se esfuerza en comer y logra coger v deglutir
algunos granos", al cabo de repetir varias veces este ejercicio, parece que lo realizi más fácilmente, el movimiento de las mandíbulas parece más amplio. Observa el autor atentamente los repetidos intentos que hace el animal durante el día para comer, apreciando siempre entre el principio y el fin de cada uno de ellos un cierto progreso en la prehensión y masticación;
esta observación le sugiere la idea de obligar al funcionamiento los músculos de la locomoción. Dos paseos, veinte minutos por la mañana y otros veinte por la tarde, efectuados
con gran dificultad, con frecuentes descansos que cada vez fueron más cortos, determinaron
una apreciable mejoría, estacionada al principio, pero muy evidente después de diez días de este régimen; aún es penosa y difícil la salida de la cuadra, pero una vez dados los primeros pasos, emprende el animal un aire relativamente rápido que tiene un poco de automático
e inconsciente que de no detenerle, parecería destinado a ser interminable.
En el curso de la enfermedad se registraron dos agravaciones que coincidieron con la supresión de los paseos correspondientes a las respectivas mañanas, la cual confirmó al autor en su opinión de que el paseo era realmente favorable al enfjrmo, por lo que ordenó el ejercicio a pesar de las mayores inclemencias del tiempo. Como en el primer caso consignado,
la curación tuvo lugar en treinta días.
El autor cree haber evitado los paroxismos y la terminación fatal gracias a este método natural y se inclina a creer que la inmovilidad y los calmantes matan al enfermo, mientras que el ejercicio moderado, al que debe añadirse una temperatura adecuada de la cuadra, le mejora y le cura. En el mismo servicio del autor, otros caballos tetánicos fueron tratados por su sucesor por los métodos usuales y con fracaso total, como le había ocurrido anteriormente
al autor mismt> con los que había tratado de la misma manera.

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